Si el termómetro sangra
mercurio azulado
la tempetatura es plana
y se obvia la fiebre
en la epidemia de ansia.
Es hielo crudo
el alimento prescrito
para cristalizar la rabia.
Muertos los gorriones,
apenas queda trino
de guardia
en la ciudad de la grieta.
No hay nadie
al lado de nadie
bajo las cúpulas
ni en los tresillos.
Duele lo mío
y lo demás es borra
de café recalentado.
lunes, 19 de noviembre de 2012
Muertos los gorriones
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
SIN VERSOS EN LAS YEMAS
Se marchitaron los brotes de versos en las yemas de estos sarmientos, gélidos de la nevada, y el racimo es promesa por incumplir. No abu...
-
Vestido de túnica de lluvia terca y constante, hago visitas programadas de protocolos de delirio. Sociedad, social, sociable, soci...
-
Entre años raros te despliegas en esplendores de esperanza. Entre meses raros y terminales de nuevas eras te proclamas plena, tú, peque...
-
Yermo en palabras, catastrófico en versos, me derramo por los días en vertido silencioso y ajeno casi a esta atmósfera que improviso de ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente si quiere que se publicará si me place.