miércoles, 30 de septiembre de 2020

CARLOS

 

Días hace ya que Carlos sabía, 
mirándote desde sus ojos claros de sabio tahúr de tute, 
reconociendo el cansancio que no lo retuvo. 

Carlos fue la calle hasta su último día, 
sus cafés, 
sus vinos, su menú de yerno e hija 
y sus partidas. 

Marro de mina de cuando la mina fue infierno, 
mano dulce de caramelos que daba en clandestino, 
como robados. 

Carlos era silencios, 
palabras justas y la justa sonrisa de los justos. 

Se fue Carlos a paso lento, a cabezada de siesta 
al sol tenue otoñado de este Mieres al que falta. 

Vega de Arriba, Mayacina, 
Jovellanos, 
Hüeria de San Juan, 
chigres de baraja y fútbol ya te extrañan 
en el naipe arrastrado. 

Se te verá en los huecos que no ocupas. 
Buen viaje, buen paisano. 



martes, 29 de septiembre de 2020

OTRA MUERTE CUALQUIERA


Cuando llegas me curvo 
para que te ahormes y me envuelvas adhesiva, 
hagas vacío y me otorgues la tibieza, 
la baja temperatura que me reduzca al tuétano, 
a la médula ósea que biológico me sustenta 
para el envite, 
para abonarte en los terrones que arraigan en mis muslos. 

Despliega los tentáculos explorando mis temores 
y mis temblores al roce 
e imprégname de las melazas que dosificas 
a válvula de alientos disipados. 

Las invasiones, mareas vivas a la canción de luna 
de ritmo de chalupa que cerca los peces más salvajes, 
los saboteadores de los arrecifes 
irisando los corales al cabo de los estallidos. 

Otra galaxia forjada en la geografía 
de estas sábanas aun latentes, 
otro día preparado para otra muerte cualquiera. 

lunes, 28 de septiembre de 2020

DIMISIONARIO

Cesar, 
darse de baja de la especie y renegar 
de la trayectoria, 
bajarse de la órbita en la próxima conjunción 
y relegarse a moléculas de cósmico polvo, 
ser esencia en la ausencia 
y colapsar en algún horizonte de sucesos. 

Me atraganto en la gelatina social 
que se me forja hormigón como sarcófago. 

Son días, 
tal vez semanas, 
quizá una hora o infinidades del tiempo que ondula 
gravitacional entre mis huecos. 

Contemplo, 
me estremezco 
y mataría, 
confieso que mataría en otro contexto, 
como siempre se hizo, 
como están haciendo, 
mucho y mal, 
como siempre se hizo, 
como están haciendo pero no, 
es por hablar, 
es por decir, 
como hablan por hablar, 
como dicen por decir, 
como nos matan sin matar, 
como nos mueren. 

Dimisionario, 
en la ruptura de todo contrato 
y vínculo con esta camada de reptiles 
superviviente de los asteroides. 

domingo, 27 de septiembre de 2020

VALOR DE GREY

 

Optar por el silencio en esta estridencia de redoble y fanfarria 
donde las gamas y las escalas son entelequias cuando se impone la ortodoxia, 
las verdades construidas a planos parciales. 

Recolocado el estante de la idea acomodada al esquema, 
solo cabe esperar a que te sirvan, 
a que te doten de los contenidos de refuerzo 
para alimentarte la identidad, la pertenencia, 
valor de grey. 

Darán igual pruebas en falso, visión en contra, 
que solo encaja lo bien medido, 
lo acotado en el lema 
del catecismo al gusto. 

Tendrás el odio bien tasado, 
identificado el objetivo para agitar la bandera 
y seguir los cánticos. 

Optar por el silencio cuando coincides, 
mejor aun cuando difieres, 
que no son tiempos de heterodoxia pues te señalan 
los enfermizos rastreadores de las equidistancias. 

Optar por los silencios, 
ganar tiempo sereno que te oree el ánimo 
y salir de puntillas de las tabernas de la algarada. 

sábado, 26 de septiembre de 2020

DAD PASO A LA SOPRANO

 

Dad paso a la soprano, 
que es del aria el tiempo, 
de las notas que arañan las entrañas sucias 
para que leviten nuestras prendas sobre las pieles febriles. 

Dad paso a la soprano etérea 
que nos desgrane la elegía, el "lacrimosa", 
que tiempo habrá para el "díes irae", 
o quizá no tanto, 
quizá proceda el coro en tanto se ve lo que se ve 
mientras ocurre lo que ni vemos. 

"Oh mío babbino caro", sentenciado 
por triaje de nuevo, 
en los lechos que ni habrá. 

viernes, 25 de septiembre de 2020

LA CALLE COMO ACCIDENTE

Con la sonrisa nublada nos cruzamos de puntillas 
en las aceras del deshielo, 
mejor ni reconocerse y alegar despiste 
o ceder finalmente con algún cabeceo de rapaz nocturna. 

O negación o espanto, 
así parece que optamos sobre lo sobrevenido 
a sabiendas de lo laberíntico que nos intrinca. 

Con la mirada colgante 
desde la barandilla de un balcón homologado, 
higiénico o relavable, 
la calle empieza a ser accidente. 

jueves, 24 de septiembre de 2020

EL CAMINO DEL HÉROE

 

El camino del héroe es a contrato eventual 
en bolsa de trabajo, 
a fin de obra subrogado, 
al peso o metro de vellocino, 
salvo comisión al sobrecoste. 

Pero habrá glorias pactadas, 
programadas ovaciones, 
algún lustre abanderado, laureles de metal 
en tanto no llegue la anorexia de las vacas 
sacudiéndoles en el seísmo 
para señalaros 
y reclamaros sacrificio cual culpables. 

Os pedirán patíbulo 
para luego lloraros en procesión. 

El camino del héroe 
es de hielo y detracción, 
de odio cotizante 
y manteca sobre el lomo. 


miércoles, 23 de septiembre de 2020

LOS VIEJOS Y NUESTRAS GUERRAS

En el año aquel que no vino Abril murieron las rosas blancas 
y todo se tornó amarillento sepia de ajado y polilla 
como decepción tras tanta euforia de sentirnos unidad por un instante, 
a horario tasado hasta el hartazgo. 

En el año aquel hubo momentos de optimismo exprimido 
sobre cadáveres casi recorridos de puntillas 
mientras nos cantábamos en vídeo directo. 

Fue aquel año en el que tu padre estuvo en suspenso 
sobre las aguas de todo sobrevenido, 
inundado de azares con mucha causa. 

Ya sé que te lo he contado, 
pero es lo que hacemos los viejos con nuestras guerras. 




lunes, 21 de septiembre de 2020

LETARGO

El letargo como recurso me reclama en demasía 
en medio de tanto ruido cárdeno, 
ruido leñoso de murmullo en grupo ralo 
o aspavientos de voz en grito en lo social acotado. 

El letargo en la caverna de un salón conectado en maraña, 
quizá demasiado redado y enredado aun para lo terapéutico, 
lo deseable para ignorarse, sedarse, volarse en pedazos de voluta 
de gas carbónico. 

El letargo como economía energética de malos vientos, 
de malos aires de confusas luces de cruce, 
de malos aires del mal querer por no odiar más de lo nunca aconsejable 
y rectificarse en lo sabio, 
regular el ralentí de lo pretencioso y ejercer deriva. 

El letargo de la balsa, 
de la hoja muerta y el lagarto más amarillo. 


domingo, 20 de septiembre de 2020

PINACOTECA DE UNO

Esos momentos que te redibujan el rostro cuando lo tenías diluido. 

Los afectos en seco y húmedo, 
verdades oleicas de aceites viejos ya 
de aromas conocidos de ciertos, 
de amables que me pincelan en lo breve 
lo que se descorre en este lienzo 
de capas de mil paisajes y retratos superpuestos. 

Cuánto me dan que ni merezco 
en estos tiempos del abrazo abortado. 

Y sigo en el caballete, 
bien presto para la trementina, 
pero me llevaré estas caricias de espátula 
que me siguen perfilando. 

Bien sé que me cuarteo en los colores, 
en tanto en cuanto las temperaturas fluctúan 
y los arcoíris quieran ser prohibidos. 

Tiempos son de tendencia al gris de los Guernica 
como para solapar la sangre que venir pudiera. 

viernes, 18 de septiembre de 2020

EN TU AIRE

 En tu aire me retuve y me entretuve hasta el ahogo 

y las palomas ciegas anidaron en la orilla 

de aquel río de palabras sucias 

en el que el cieno era dorado, 

limo dulce y fermentado 

en los veranos más crueles. 


Fue allí donde pesqué salmones de alabastro 

con cebo de luciérnagas incendiarias. 


Luego emigré a la espuma del gris roto 

de sales del deshielo 

y a la tierra ordeñada en negro, 

abonada en rojo, 

que entrega frutos de corta temporada. 


En tu aire me retengo y me entretengo hasta lo propio 

y habrá tórtolas gritando consignas 

en las encinas encaladas. 

lunes, 14 de septiembre de 2020

POCO MISTERIO HAY

Poco misterio hay en todo esto, 
poco más de lo que el miedo da 
pues es el miedo el que los misterios funda, 
infunde y hunde los navíos 
con sirenas y tritones, 
monstruosos cefalópodos 
y ballenas blancas 
por dar sentido a los naufragios. 

Poco misterio hay en lo que hay, 
que bien poco es 
por el lugar que ocupa y lo poco que recorre. 

Poco misterio hay en lo que nos construye, 
lo que nos destruye 
y lo que nos instruye nunca vendrá en libro sagrado 
o baraja de santería. 

Poco misterio hay, 
más bien ninguno, 
todo es tan fácil 
y tan dolorosamente jodido
en la no asunción de lo inevitable. 

Poco misterio hay 
aunque a veces pienso 
que qué bien que hubiera. 

ME AMANECIÓ


 Hoy me amaneció el silencio, 

el silencio atroz que me acompaña, 

el silencio atroz que acalló la voz de un cómico. 

Voz de quinta galería 

de cualquier mina, 

de palacios de la intriga, 

de los celos y lo trágico 

del tiempo de algún ministerio, 

voz de Rey, 

de saltimbanqui, 

juglar y bufón en pasacalles, 

el arte y la memoria en la que habitas. 

Hoy me amaneció la ausencia, 

de las ausencias que son abismos 

cuando la presencia fue siempre tanta, 

impecable, incontestable de honesta, 

de bonhomía de andante por carreteras de la legua, 

tan hidalgo como escudero. 

Breve tiempo compartimos, 

breve tiempo de territorios comunes, 

libros y salas de espera, 

malditas salas de espera, 

el peor escenario que nadie nunca quisiera. 

Hoy me amaneció el desgarro 

el desgarro de un telón 

por el que hace mutis un hombre entero, 

cabeza alta y gesto serio 

con la galanura de los grandes, 

con la sonrisa en los ojos 

que solo tienen los buenos. 

Lobo joven, 

lobo fiero. 

Hoy me amaneció el dolor 

y los momentos. 

sábado, 12 de septiembre de 2020

IGUAL FUE

 Fue igual que pisé tanta hierba, 

por cortar, 

recién segada, 

de la prieta sureña 

y de la explosiva de los nortes. 


Fue igual que tanta arena retuve en los pulgares 

de mis pies salinos 

de recorrer estrechos y anchos, 

de Mediterráneos de azul imposbible 

y de Atlántico del gris espumado. 


Puede que sea que caminé mas de lo debido, 

fue igual que pudo ser, 

que ahora parece que arraigar quisiera, 

como en retorno en arbusto, 

en encina, 

en ciprés, 

en sauce llorón de sombra para los amantes febriles. 


Fue igual que no fue tanto pero tanto fue. 

Tanto fue en lo breve, en lo intenso, 

en lo denso y lo leve, 

en lo lleno y en el vacío. 


Igual fue que fue eso. 

TRATADO DE UN DESAUTORIZADO SOBRE LA POESÍA Y SUS DERIVADOS

 Hoy diría que no fue el día de este verso, 

espérate que te lo explico, 

te lo explico y te lo grito, 

yo diría que no fue el día de este verso 

tan grande que guardo dentro, 

pero espera que te lo explico, 

te explico como llegué a la métrica imperfecta del ruido de la taberna, 

del salto del saltimbanqui y del navajazo del maldito que nunca vio faca. 

Porque el arte soy yo pero te lo explico, 

a ver, 

yo te grito, 

tú me escuchas, 

y te jodes y me aplaudes 

o te esputo en el próximo poema a micro, 

a micro, 

a micro abierto o concertado, 

a micropoesías, 

a micromachismos, 

a microhomofobias, 

a microelitismos, 

a micro chiringuito, 

a microinvento, 

a microanarquía y microviolencias. 

Pero no te alarmes, 

oyente o lector de móvil, 

yo te lo explico, 

que ofender no pretendo o sí, 

pero así es mejor, 

que yo te explico qué es poesía hoy en día, 

microgilipollas, 

pero toma otra caña, 

que el evento lo merece. 

Qué es poesía, 

otra vez, 

la poesía soy yo, 

pero te explico por qué, 

porque escribo mis delirios y tengo más cara que espalda, 

joder, 

qué poco poético me quedó eso, 

o igual sí por rompedor, 

que todo vale por abrir brecha en el arte contemporáneo. 

Pero a ver, 

hagamos una pausa que os lo explico, 

lo de romper es por buscar otras fronteras, 

otros lenguajes menos opresivos, 

pero callad, hostia, que estoy declamando. 

Y entonces vengo yo y me cago

y os orino encima y os amenazo 

y baso mi arte en ser Bukowski reencarnado, 

como si los demás no tuvieran callejones 

en los que haber muerto y matado, 

mas reales que ensoñados. 

Pero esperad que os lo explico, 

que a mí me aplaudieron los versos, 

la leche, 

tuve algún éxito y ahí sigo, 

dando por culo en mudo, 

en local, 

en rural, 

en melaza de rapsoda moribundo 

que bien exploto. 

Esperad, que os lo explico, 

no es que quiera uno morirse,

pero ayuda para el que no tiene voz de micro 

o vídeo de youtube. 

Y empecemos otro verso pero, 

cómo se os ocurre escribir 

de lo que yo no creo que hay que escribir 

en este momento preciso, 

que bien seré yo quién decida convocar los parnasos. 

En esta estrofa me refiero a...

que más dará. 

Pero puestos a culminar, 

explicaré antes el remate, 

y haré un rap por más que mate 

y haya empate

en este delirio de poetas 

de tanta jeta, 

de tanto inflar la bomba todo el día 

con la vanguardia 

de la poesía, 

de la taberna, 

la polla tierna, 

la mente fría, 

más bien vacía 

y el postureo, 

que me mareo 

y me meo, 

y hasta tolero 

por marginal 

el maltrato y el eructo 

de un anormal 

con verso abrupto. 

Eh, Eh, Eh, 

bien me la suda, 

bien lo sabéis, 

me conocéis 

o ya no hay cura. 

Esperad, que ahora os lo explico, 

que rapero nunca fui, 

ni pretencioso en lo suyo, 

pero es por joder sin ofender. 

Más que nada porque va a ser el poema más largo de toda mi obra

de poeta que nunca lo fue. 




viernes, 11 de septiembre de 2020

DEL TOBOGÁN AL TIEMPO

 El tobogán da vértigo pero a veces desacelera, 

te ofrece curvas y repechos leves para retornar a las espirales. 


Las espirales que nos conforman en los caparazones. 


Los caparazones que habitamos multiformes y mutantes en el tiempo. 


El tiempo, siempre el tiempo. 


El tiempo.

miércoles, 9 de septiembre de 2020

DE LO ANGOSTO

 Se angosta el paso prefabricado 

de mis aires y estertores hacia algún camino 

o encrucijada de matorral o de cipreses. 

Hacia algún túnel del tiempo, 

un salto de agua 

o un retal de nube abandonado por la última tormenta. 

Lo llevo todo escrito, 

por si hubiera examen improvisado 

o control de documentos, 

que tiempo es de controles 

y el Presidente prohibió el vuelo de los peces entre olas. 

Moderaré el discurso pues el rabiar no ayuda 

y el verso desbocado deja mala imagen 

en el hacedor de estrofas 

que ahora bordaré en bastidor de expectativas, 

conjugando con tibieza. 

Habrá que volver a escarbar en las formulaciones 

para diseñar la carta de navegación hacia los archipiélagos posibles. 

Agotador es el viaje 

para un Ulíses de barrio bajo 

que no persigue glorias ni encuentros con sirenas, 

las que siempre llaman cantando. 

Volver a Ítaca, 

maltrecho y sucio de sal de espuma, 

sería mi afán 

pero quién sabe de las voluntades 

de los iracundos dioses que nunca fueron. 

Se angosta el paso de esta mina improductiva, 

que no da ni mineral de canto, 

ni ruido de derrabe en un posteo precario 

que a cada poco cruje. 

Entre tanto cantaré en lo amable 

si es que me deja el estallido. 

martes, 8 de septiembre de 2020

LA ERA DE ACUARIO

 Ya sabemos lo que sabemos 

y muchos saben más que los que saben, 

así que nos olemos los culos buscando asintomáticos 

de lo creyente o lo disidente, 

como cánidos leales pero prestos a la jauría. 


En tanto en cuanto, los lerdos, 

multiplicados y orgullosos de su vacuidad, 

del graznido lustroso de águilas imperiales 

y el grito estridente de lo intimidatorio, 

se pasean henchidos de consignas, 

tradiciones y monsergas de misal, 

rececho de montería 

y burladero. 


Otras tribus danzan alrededor de altares paganos 

invocando alienígenas que nos libren de la ciencia 

que cuestiona las verdades de lejías diluídas, 

imposiciones de manos 

y la era de Acuario, 

desde esta planicie de planeta 

ocupada por los microchips homicidas. 


Ya sabemos lo que sabemos 

porque sabemos más que los que casi saben, 

porque nos quitan la venda 

para crear la raza del emancipado, 

el no creyente de lo razonable, 

el profeta del suicidio colectivo. 

lunes, 7 de septiembre de 2020

CUANDO TODOS LOS VALSES MURIERON

 Habría que recuperar lo pendiente 

que este mes es lo que pide, 

pero este es año anómalo 

para cualquier asignatura. 


Mes de retorno bajo máscara, 

de restaurar lo mal forjado 

cuando las fraguas no prenden desde aquella primavera 

y los aceros son de carbono enfermo. 


Y los niños no entienden de esta guerra, 

como de ninguna nunca en ningún caso, 

y desfilan en cuadrículas de metro y pico, 

pastoreados por encima de sus posibilidades. 


Habría que recuperar algo, 

lo que salvarse bien pudiera 

de este naufragio lento 

con los músicos tocando a metro y medio 

cuando todos los valses murieron. 

domingo, 6 de septiembre de 2020

ALBARÁN DEL ASESINO

Anoche disparé contra aquella frente, 
siempre fui más de frente que de nuca, 
de pecho que de espalda, 
y lo que pareció inquebrantable 
se tornó cristal de vitrina. 

Ni me preguntó por qué 
porque bien lo sabía. 

Cuando estaba tendido en el suelo, 
desmadejado sobre el charco inevitable, 
mientras guardaba el arma 
me pregunté por qué 
y yo, 
que tan claro lo tuve, 
no supe qué contestarme 
y me fui llorando a la taberna clandestina 
para bañarme en blues y en bourbon caro. 

sábado, 5 de septiembre de 2020

DESVARÍOS DEL DESUBICADO

 Vamos a ver, hijos de puta, 

soy incómodo por moribundo lento, 

bien es cierto que no tengo precisión en la fecha aproximada, 

pero sigo escribiendo en pseudodifunto 

porque así llevo varios años. 


No es postureo, miserables de mierda, 

que quien respira a la contra soy yo 

y solo yo sé de saberme breve. 


Puedo ser más maldito que el mismo Judas ahorcado

y cagar versos desde la sombra de todos los callejones 

pero se me pasó la época 

y ahora agoto en el maratón desde el sofá a la nevera. 


Así que dejadme escribir melosos versos 

cuando se me ponga en la melosa promesa 

de alguna eyaculación, 

o versos lúgubres cuando me vea más cerca 

de lo que más cerca estoy, 

como todos. 


No tengo garganta para ser poeta contemporáneo, 

que me la arrancaron, 

craso error, 

qué más hubiera querido que poder desplegar mi palabra de idiota 

con entonación de actor a medias. 


Por eso permitidme, ¡oh! dueños de las esencias, 

que despliegue mis desvaríos por aquí a lo anárquico, 

a teclado de mudo, 

en gratuíto, 

en barato, 

en baratija de verso, 

que no preciso de micro 

ni de libro catalogado en colección ilustre. 





viernes, 4 de septiembre de 2020

CUANDO SE TUERCE EL VERSO

 Hay veces en que se me tuerce el verso, 

no encuentra guía que lo enderece 

y se enrosca en lo tortuoso 

por recrearse en el rizo, 

en el bucle, 

tornándose leñoso mientras estrangula una idea. 

Se me tuerce el verso y se me espina 

abrazando corazones sagrados 

o coronando crucificados 

con mi palabra irreverente y sangradora 

de los adictos al tormento. 

A veces se me tuerce el verso  

y me rompe el ritmo estipulado 

y el alternativo

y de la melaza a la blasfemia va un paso de metáfora. 




FUERON TANTOS

 Fueron tantos los muertos perdidos 

por los campos de batalla, 

con sus vanas glorias, 

con sus glorias vanas, 

por los paredones más infames 

o las más tristes cunetas, 

fueron tantos los presentes truncados 

y los futuros desechados, 

y todo a mano de hombre, 

a mano de hermano, 

a mano del odio abonado 

en el terrón más necio de una patria 

con las sales más falaces de los mitos 

adobando las doctrinas para justificar las matanzas 

que alimentan a los carroñeros que nunca mueren, 

que nunca empuñan arma pero arengan 

desde atriles del delirio 

o púlpitos de la inmundicia, 

beneficiarios siempre del desastre. 

Fueron tantos los muertos, 

tantos son, 

tantos serán en el trayecto. 

jueves, 3 de septiembre de 2020

NO SE DICEN LAS COSAS

 No se dicen las cosas como se decían cuando la palabra era huella, 

no un explosivo volátil y aleatorio a la declamación o la coma, 

tal y como ocurre en este tiempo de la tachadura preventiva. 

No se dicen las cosas, 

se dicen los silencios y se arrojan al rostro como esputo de desprecio. 

No se dicen, 

no nos decimos y callamos y no oímos 

y sin saber actuamos al albur de las ráfagas de viento. 

Si dices porque dices, 

si callas porque otorgas 

y en los decires muerdes 

y en los callares empuñas las facas ávidas de riñón descubierto. 

No se dicen las cosas como cuando se insultaba en crudo, 

sin cocción a baja temperatura, 

al vacío en plásticos contaminantes. 

martes, 1 de septiembre de 2020

ESTE SEPTIEMBRE

 Volvió el mes de los retornos 

más incierto que nunca fuera, 

con todo deshecho a pupitre salteado. 


Septiembre nace atónito, desconcertado 

y expectante a todas las expectoraciones 

que surgir pudieran. 


Septiembre refresca sin mucha gana, 

por si los virus, 

y sólo sabe de empezar a dorar las hojas 

de los hayedos. 

SIN VERSOS EN LAS YEMAS

Se marchitaron los brotes  de versos en las yemas de estos sarmientos,  gélidos de la nevada,  y el racimo es promesa por incumplir.  No abu...