domingo, 10 de junio de 2018

AQUEL DÍA.

Y fue aquel día en que encontró
un pájaro moribundo en los aledaños
de cualquier casa que tener hubiera podido,
cuando descubrió la esencia de lo que no sucede.

Aquel día creció en razones y negó verdades,
las inoculadas en miedos calibrados
para domar cachorros
de cerebro interrogante.

Entonces fue que tuvo luz
y el terrible peso de la orfandad
le atenazó en el pánico,
mas fue libre en la asunción
de las realidades.

No tuvo eternidades
pero dejó memoria.

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