Aflora en lo diario,
como llovizna de abril,
la palabra de arista
disfrazada de inocencia.
No intencionada puede
desvelarse la saña,
el mal querer
mal solapado.
Interés insano
por saber para mal.
Y el síntoma
es diagnóstico
de anómala catadura.
Tumor de resabios
instalados en la nuca.
Crece la araña
en las sedas de la mente
y muerde los afectos
infectando vileza,
distancia de repulsa,
amargor de inercia.
Acotando las valijas
de un viaje concertado,
probable naufragio,
vuelo cancelado.
domingo, 20 de abril de 2014
Palabra de arista.
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