viernes, 11 de enero de 2019

Y DE VIVIR

Y de amar y de vivir y de doler
y de morir y de saber 
que es todo muy triste a veces. 

A veces el alud de lágrimas 
te da la razón 
y te deja hundirte, 
convenientemente, 
a fin de sanear las cañerías 
de un ánimo devastado. 

Una canción, 
un verso roto, 
una escena en blanco y negro, 
te arrastra al horizonte de sucesos 
de aquel agujero no tan negro 
que quizá te lleve. 

Y lo viscoso del ansia 
te ahoga. 
Porque tienes pena a mares, 
a repartir, 
que rebosa a ratos 
en que nadar ya no es posible.

Bueno será desatar las cataratas 
de los llantos retenidos 
por subsistirse. 

Bueno será resucitarse 
después de esta sepultura 
de ansiedad en rama 
que a cada poco 
tiene que hacerse notar. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comente si quiere que se publicará si me place.

SIN VERSOS EN LAS YEMAS

Se marchitaron los brotes  de versos en las yemas de estos sarmientos,  gélidos de la nevada,  y el racimo es promesa por incumplir.  No abu...