Luzco las galas
de lo que trajino a mano,
luzco metales baldíos
pero soy mano dispuesta.
Bajo los azules
hay persona
que sirve a quién merece.
Injuriado a cada poco,
a tu llamada atiendo.
Y no,
yo no fallo.
Y si fallo hay remplazo
que tu demanda solvente.
Incómodo me asumo
en circunstancias varias,
mas es más el alivio
que te aporto si requieres.
Policía de buen grado.
Orgullo en el servir
y tesón ante lo adverso.
miércoles, 2 de octubre de 2013
Policía
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
SIN VERSOS EN LAS YEMAS
Se marchitaron los brotes de versos en las yemas de estos sarmientos, gélidos de la nevada, y el racimo es promesa por incumplir. No abu...
-
Me llegan cantos de terrón en voz de musgo, en voz de ave que sortea los pentagramas volando desde la entraña para arroparme en el duerm...
-
Los propósitos en apósito y lo pendiente pendiendo en un tendedero a la deriva de los temporales. Con las cartas tan marcadas se confunde ...
-
La hojarasca borra todo el sendero y los árboles no avisan, como intentan los semáforos tras la nevada urbanita. La importancia de las s...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente si quiere que se publicará si me place.