Me dijeron que no,
yo dije sí,
y digno emprendí
peregrinaje reafirmado,
convicto de la discrepancia.
Errado debía estar
el bienintencionado común sentido,
que mi albedrío coartaba
y mis elecciones,
por propias y ajenas al consejo,
deberían tornarse fórmula irrefutable.
Mas los avatares,
adosados a las vivencias,
dan síntoma del mal del necio
y obligan a revisar currículo
y otorgar parciales razones
a los negados augurios.
Tarde debe ser
para recuperar materia
y uno es forja con lo malogrado.
Al final no habrá diploma.
viernes, 20 de junio de 2014
Necedades
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
SIN VERSOS EN LAS YEMAS
Se marchitaron los brotes de versos en las yemas de estos sarmientos, gélidos de la nevada, y el racimo es promesa por incumplir. No abu...
-
Vestido de túnica de lluvia terca y constante, hago visitas programadas de protocolos de delirio. Sociedad, social, sociable, soci...
-
Entre años raros te despliegas en esplendores de esperanza. Entre meses raros y terminales de nuevas eras te proclamas plena, tú, peque...
-
Yermo en palabras, catastrófico en versos, me derramo por los días en vertido silencioso y ajeno casi a esta atmósfera que improviso de ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente si quiere que se publicará si me place.