Aún quedan manantiales
paridos entre las rocas,
manando vida fresca,
limpia de poso turbio,
de cal acorazada.
Hay torrentes que lavan
los fangos y las miserias,
diluyéndolos hasta el mar
cuya espuma los blanquea.
También quedan aguaceros,
lloviznas de nube blanca
borrando humos de odio,
mezclando colores
con el sol en alianza.
Y queda abeja laboriosa,
sorteando las arañas,
libre del veneno eterno,
regalando mieles claras.
Si tu miras lo verás,
destruyendo las persianas,
que no todo se perdió,
que la luz tiene camino.
Si tu miras lo verás,
ResponderEliminardestruyendo las persianas,
que no todo se perdió,
que la luz tiene camino.
Me ha gustado mucho.