Parece probable
seguir viaje
en camino nuevo,
pavimentado en piedra lavada
sobre el sendero
viejo,
hundido de pisadas
sin rumbo,
de tropiezo cotidiano,
de rodadas de carro
destartalado de aguaceros.
Camino aquel,
minado
de espina
de zarza lacerante.
Camino aquel,
borrado,
confundido de cuneta,
impracticable.
Recomendable es
la obra,
pública y privada,
y caminar desnudo
sobre senda nueva.
Mismo equipaje,
misma compañía,
mismo destino.
Sin atajos
ni desvíos
a los pedregales,
o a jardines de fuga
de fugaz aroma.
Ir despacio,
recto,
de la mano siempre,
la vista al sol,
desempolvando horizontes
recién desenterrados.
Reconstruir los valles
y las lomas
y los frescos arroyos,
donde soltar los peces,
donde lavar el rostro,
la tez de pétalo
de la flor única,
esa que plantamos
y que nos mira,
interrogando,
siempre expectante
al destello
de la alegría.
Y si no das más,tan solo encuentra lo que hay en tus manos,piensa que dar amor nunca es en vano.
ResponderEliminarSigue adelante sin mirar atras.