jueves, 23 de abril de 2009

MALES

Aquel hombre,
de cuya boca manaban
rosas en racimo,
regadas de arias
y atadas con trazos
de pincel diestro,
murió un día,
enfermo terminal,
invadido de tumores
de belleza extrema.

1 comentario:

  1. Narciso, Narciso!! jejejejeje

    "Si tomaras mi lugar
    y te vieras con mis ojos
    entenderías sin dudar
    de Narciso y sus antojos!"
    sirenario.blogspot.com

    Buenos versos!

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