en vez de atriles copular,
en verdad podrían mudar
la mentira que es su fuero.
Mas no se pueden curar
de tanta infamia en pandemia,
que es peor que la alcoholemia,
la adicción a manipular.
Y ahí está la miseria
de tan loable sistema
que se tornó en pamema,
consistiendo en una feria,
mercadear bajo un lema,
de cuatro frases al uso
que algún charlatán dispuso
para dormirnos la flema.
Y puede sonar a anatema
renegar de democracias
donde asumir las falacias
es la norma, no el problema.
Y cuando llueven desgracias
en casa del ciudadano
te pueden tender la mano
y tras robarte dar gracias.
Pero ellos son ajenos,
que están hechos de otra pasta,
que, más que clase, son casta
y hasta se tienen por buenos.
Por el voto legitimados,
aunque venga de la inercia
que provoca la anestesia
que nos dan por todos lados.
Naufragando por internet llegue a las orillas de Versos desde el filo y lei Politicadas... Me gusto y contribuyo con esta pequeña anecdota:
ResponderEliminarEl viejo sabio aconsejó a un político que se pusiera bajo la lluvia y elevase la cabeza hacia el cielo:
-Le traerá una revelación-le prometió
Al día siguiente, el político volvió.
-Seguí su consejo-le dijo-, y el agua me cayó por el cuello y me sentí un tonto.
-Bueno-dijo el clérigo-, para ser la primera vez, ¿no le parece bastante revelación?
Desde Montevideo te saluda Luis. Te invito a que visites mi recien estrenado blog:http://www.usaelreflejo.blogspot.com/