una idea vana,
imprecisa,
un delirio de trastornado
que vendría con alguna fiebre.
Se diluye en la memoria fallida
y retorna extemporánea
a cada poco
para mutarme el ánimo.
Desatino debe ser,
seguramente,
pero el desatino es constante
en esta trayectoria
de accidentada vocación.
Se espesan las horas
de esta tarde postergada
y la idea dichosa
se derrama entre los dedos
desaguada,
desechada por azares
o por causa obvia.
Entonces retorno
y me sumerjo en redes
que contaminan lo posible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente si quiere que se publicará si me place.