Es de seda
el silencio
cuando se viene
del ruido de lija.
Siempre triste,
mas curativo
cuando las palabras
se tornan nocivas.
Palabras que fueron
bálsamo esporádico
se apilan
en argamasa de despecho
formando muro
infranqueable,
lapidación cruel
que apaga el rescoldo
que pudiera quedar
de lo vivido.
Silencio,
tras diluvios
de ruido necio,
silencio como sol tibio
asomado tras la nube.
miércoles, 3 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
SIN VERSOS EN LAS YEMAS
Se marchitaron los brotes de versos en las yemas de estos sarmientos, gélidos de la nevada, y el racimo es promesa por incumplir. No abu...
-
Vestido de túnica de lluvia terca y constante, hago visitas programadas de protocolos de delirio. Sociedad, social, sociable, soci...
-
Yermo en palabras, catastrófico en versos, me derramo por los días en vertido silencioso y ajeno casi a esta atmósfera que improviso de ...
-
Sujétame un momento la vida que te construya un poema sin mucho cimiento, desmontable a tu antojo, de campaña, que te resguarde y te aco...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente si quiere que se publicará si me place.